
Si tienes una joroba en el cuello primero tienes que verificar los hábitos, y esto empieza cuando estás recostarse o durmiendo para corregir la mala postura del cervicodorsal. Esto provocó que se viera la cabeza más para alante, incluyendo que cuando estés parado se pueda apreciar una mala postura.
Tips Dejar esto malos Habitos
1-No utilizar doble almohada: Lo normal es una almohada bajita que me mantengan la columna cervical alineada, mucha personas al tener el joroba en el cuello Mayormente siempre quieren doble almohada porque se siente más cómodo, Pero cuándo utilizamos doble almohada la cabeza ya no está alineada con la columna, Puedes hacerlo con un rollito (puede ser una toalla) en la parte del cuello cervicodorsal.
2- En la mayoría de los hogares de las familias suele haber una televisión en la habitación suele pasar Qué personas comienzan a mirar la televisión acostados tomando una mala postura al levantar la cabeza 145 grados con respecto a la cama para ver la TV.

3-Otro hábito que también influyen en esto es utilizar el celular en la cama o leer un libro esto produce problema cervicodorsal al inclinarnos para poder ver el celular popo poder hacer contacto visual con el libro. Una mala postura en la cama también puede ser sentado.
Puedes optar por estar boca abajo pero como una postura qué el grado de 144° sea presionando la columna hacia arriba, también puedes hacer acostarte de lado con una almohada entre las piernas y otra acomodándola cabeza con una almohada delgada.

Es fundamental que al detectar una joroba en el cuello, se revise y modifique los hábitos posturales, especialmente los que se adquieren al dormir. Adoptar una postura adecuada al recostarse, ya sea boca abajo o de lado con una almohada delgada para la cabeza y una entre las piernas, puede ayudar a aliviar la presión sobre la columna cervical y dorsales. Además, corregir la alineación de la columna durante el descanso favorece no solo la mejora de la postura, sino también la prevención de dolores y complicaciones a largo plazo. Incorporar estos hábitos en la rutina diaria puede ser clave para evitar la joroba de cuello y promover una postura saludable.